Alimentación en niños, ¿qué es la nutrición intuitiva y cómo funciona?
La alimentación es uno de los aspectos más importantes de nuestro día a día. Cada vez somos más conscientes de la influencia que tiene en nuestra forma física y nuestra salud. Sin duda, es un tema complejo ya que existe mucha información y muchas de las cosas que se dicen son mitos alimentarios o leyendas urbanas. Sin embargo, todos podemos estar de acuerdo en que algunos alimentos nos ayudan a estar más activos aportándonos energía, otros mejoran el estado de nuestra piel…
Sabiendo la influencia que tiene, intentamos darle a los más pequeños de la casa lo mejor para ellos. Por eso, cuidamos los alimentos que les damos a nuestros niños. Por suerte, cada vez aparecen más estudios relacionados con la alimentación y la nutrición. Lo último es la alimentación intuitiva. Pero, ¿qué es y cómo funciona? ¿Es útil para los más peques? ¡Te lo contamos!
¿Qué es la alimentación intuitiva?
Según la autora del libro “The rules of normal eating”, Karen Koenig, los seres humanos estamos estado practicando la alimentación intuitiva desde los inicios de nuestra existencia. Estamos hechos para saber qué alimentos necesitamos y cuando. Sin embargo, con el transcurso de los años y los siglos, parece que hemos olvidado cómo hacerlo. Hemos dejado de escuchar activamente a nuestro cuerpo y, por lo tanto, hemos dejado de darle lo que necesita.
Pero, entonces, ¿qué es la alimentación intuitiva? La alimentación intuitiva es un tipo de alimentación consciente que tiene en cuenta la escucha del cuerpo de forma natural para dejar atrás las razones psicológicas o sociales que nos llebçvan a alimentarnos inadecuadamente. Practicar este tipo de alimentación consciente consiste en aprender a escuchar a tu cuerpo y darle lo que necesita en el momento que realmente le hace falta. Es decir, consiste en comer cuando realmente tenemos hambre y darle a tu cuerpo lo que necesita en cada momento. ¿Cómo hago esto?
Principios de la alimentación intuitiva
Los principios de la alimentación intuitiva son diez pero lo más importante que debes saber y debes recordar es comer cuando tengas hambre. Parece obvio, lo sabemos. Sin embargo, parece que es algo que hacemos muy de vez en cuando. Muchas veces comemos por inercia o por aburrimiento. ¿Cuántas veces estás en tu casa tan aburrido que miras tu nevera cada cinco minutos? En realidad no tienes hambre, pero comer entretiene. Otras veces comemos por inercia. Es la hora de comer y aunque no tengas hambre, comes. Otras veces lo hacemos al revés. Aguantamos las ganas de comer porque aún no es la hora.
Por eso, empieza a practicar la escucha activa con tu propio cuerpo. Cuando sientas deseos de comer, pregúntate si realmente tienes hambre. Si no puedes asegurarlo, lo más probable es que no tengas hambre. Si la respuesta es un rotundo “sí”, come sin importar la hora o el lugar. La alimentación intuitiva es comer en cuanto tengas hambre y sólo cuando tengas hambre.
Come lo que te pida el cuerpo
Una vez empecemos a comer cuando realmente tengamos hambre, el siguiente paso es comer lo que te pide tu cuerpo. Este paso es Come loun poco más difícil que el anterior. Tu cuerpo te está diciendo que o comes algo o te la un telele. Pero, ¿qué es lo que necesito? Un truco sencillo para descifrar lo que tu cuerpo te pide es pensar que estás comiendo un alimento concreto. Imagínate comiendo fruta, carne, pescado, verdura o chocolate. ¿Con qué alimento se te ha caído la baba? Eso es lo que necesita tu cuerpo.
Identifica lo que es hambre y lo que no
Pero, puede que siempre te apetezca comer chocolate o chucherías, ¿no? En realidad no es así. Lo único que hay que aprender a escuchar bien a tu cuerpo. Tenemos que descubrir qué es lo que nos hace comer y que no es hambre. Es decir, tenemos que aprender a ponernos ciertos límites. Respetar tu cuerpo es una de las cosas más valiosas que debemos desarrollar. Es necesario ser consciente de cuando comemos por necesidad y cuando lo hacemos por ansiedad, gula…
Alimentación intuitiva en niños
Sabemos lo que estás pensando. Todo esto está muy bien porque soy un adulto y soy consciente de lo que quiero y necesito. Pero, ¿cómo puede mi hijo practicar la alimentación intuitiva? Suena utópico pero deja que los más pequeños coman cuando les apetezca. Parece difícil de llevar a cabo y puede que pienses que es peligroso ya que puede apetecerle comer solo cosas “malas”.
Sin embargo, este es uno de los mejores métodos para alimentar a tus hijos de forma saludable. Así, aprenderán desde pequeños a escuchar a su cuerpo, a regular la cantidad de comida que necesitan en cada momento y tendrán todos los nutrientes cubiertos. La clave es poner a su disposición comida saludable en todo momento y dejar que ellos elijan cuando y cuanto. Así, verán la hora de comer como un momento agradable, donde no hay ni premios ni castigos.
Lo cierto es que los niños nacen como comedores intuitivos. Saben cuándo comer y cuándo parar. Puedes dejar de inventarte juegos para que tus hijos se terminen el plato. Parece que el avioncito ha dejado de ser el mejor método. Olvídate de reglas o dietas milagrosas que solo hacen que te mueras de hambre a todas horas. Es momento de escuchar a tu cuerpo, escuchar a los más pequeños y confiar plenamente en lo que os dicen.