Mitos alimentarios más comunes, ¿son realmente ciertos?
La alimentación es una de las partes de nuestra vida más importantes ya que es la clave de una vida más saludable y activa. Aunque cada vez estamos más informados, en muchas ocasiones nos basamos en mitos o leyendas urbanas que hemos escuchado en algún momento. Aquella vez que escuchaste algo en la televisión, es vez que estuviste charlando con un amigo…
Como todas las leyendas, hay algunas que son ciertas, otras son totalmente erróneas y otras tienen parte de ambas. ¿Realmente se van las vitaminas del zumo de naranja? ¿Es mala la sacarina y el resto de edulcorantes? ¿Funcionan los productos light? ¿Tienes curiosidad? ¡Vamos a desmentir algunos mitos alimenticios!
“Bébete el zumo antes de que se le vayan las vitaminas”
¿Cuántas veces habremos escuchado esta frase cuando éramos más pequeños? Puede que te hayas pegado toda la vida desayunando y tomándote el zumo corriendo porque tus padres te repetían esta misma frase. ¿Pierde el zumo sus vitaminas? Parece que esta afirmación es falsa según el artículo Recomendaciones de manipulación doméstica de frutas y hortalizas para preservar su valor nutritivo de la Revista Española de Nutrición Humana y Dietética.
Lo cierto es que, aunque creamos que la vitamina C del zumo es poco estable, se conserva perfectamente hasta doce horas después de haberlo exprimido. Solo en condiciones extremas como temperaturas de más de 120 ºC disminuyen la cantidad de esta vitamina. Definitivamente, no hacía falta semejante rapidez. Eso sí, si esperamos mucho para bebernos el zumo su sabor se suele poner amargo.
Edulcorantes químicos, ¿aliados o enemigos?
Según los últimos datos, los nutricionistas recomiendan tomar un máximo de 25 gramos de azúcar al día. Es decir, unas siete cucharadas. Sin embargo, debemos tener en cuenta también el azúcar que contienen los alimentos de por sí. Por eso, muchas personas se han pasado a los edulcorantes artificiales como la sacarina. Pero, ¿son realmente estos productos químicos más saludables que el azúcar?
Sin lugar a dudas, limitar la cantidad de azúcar que consumimos siempre va a ser algo bueno. De momento, no hay una versión clara sobre estos productos. Sin embargo, aunque los edulcorantes no fuesen perjudiciales como tal, sabemos que suelen ser uno de los causantes del aumento de peso. Al consumir edulcorantes, creemos que podemos relajarnos con otras comidas ya que hemos rebajado el injerto de calorías y eso nos puede llevar a un aumento de peso. En definitiva, podemos decir que no son enemigos pero, igual que el azúcar, siempre hay que consumirlos con moderación.
Comer fruta después de comer, ¿engorda?
Desde hace un tiempo venimos escuchando este tipo de afirmaciones. Muchas personas han cambiado sus hábitos y ahora empiezan las comidas por el postre, la fruta. Sin embargo, comer fruta antes o después de las comidas engorda exactamente lo mismo. El aporte calórico y nutricional no varía en absoluto. Entonces, ¿por qué se dice que que engorda menos?
Porque comer fruta antes de cualquier comida ayuda a saciarte debido al alto contenido en fibra y, por lo tanto, comes menos. Sin embargo, ambas opciones son totalmente saludables. Lo recomendable es comer de dos a tres piezas de fruta mínimo al día. Así, le aportamos nutrientes a nuestro organismo y disminuimos el riesgo de padecer trastornos cardiovasculares, algunos tipos de cáncer y otras enfermedades.